Análisis de Cursed to Golf

Chuhai Labs, desarrolladora japonesa y editora de juegos independiente, lleva luchando con todas sus fuerzas desde su fundación en 2020 por traer al mercado juegos innovadores y únicos.  En esta ocasión, nos sorprenden con Cursed to Golf, un carismático título indie de golf en 2D con espíritu roguelike que nos ha resultado de lo más refrescante de este verano.

En Cursed to Golf debemos enfrentarnos a multitud de pistas, cada cual más complicada, llenas de peligros y obstáculos para salir airosos de un campo de golf situado en el mismísimo infierno. Tendremos que ser habilidosos y perspicaces para lograr superar todos los hoyos y lograr regresar así al mundo de los vivos. Pero, ¡cuidado! Si fracasamos en el intento tendremos que empezar todo el recorrido desde el principio y cada ronda nos enfrentará a hoyos totalmente diferentes cada vez.

Meterla en el hoyo para “salir del hoyo”

La historia de Cursed to Golf no es nada del otro mundo (valga la ironía) pero resulta bastante curiosa. Encarnamos el papel de un golfista profesional que está a punto de lograr hacerse con el campeonato. En el último hoyo, antes del golpe final, sucede una tragedia que acaba con nuestra vida y nuestra alma queda atrapada en el infierno del golf.  

Confusos y perdidos en el inframundo, nos encontraremos con “El Escocés”, el espíritu de un legendario golfista que lleva atrapado muchísimo tiempo allí. Este simpático personaje, sobrecogido por nuestra presencia y sorprendido por nuestras habilidades golfísticas nos explica la situación y nos indica que hay una manera de salir de allí y regresar al mundo de los vivos. Nuestro objetivo será completar los 18 hoyos de un campo de golf maldito custodiado por un ser llamado “El Guardián del Green”. Este maléfico personaje posee la habilidad de cambiar la configuración de los hoyos a voluntad y nos complicará la tarea de llegar al final. Cada vez que fracasemos deberemos empezar desde el principio del recorrido y enfrentarnos a una configuración de hoyos totalmente distinta. ¿Seremos capaces de regresar al mundo de los vivos?

Cursed to Golf: plataformas, roguelike y golf

La peculiaridad del juego es que los hoyos tienen una estructura de juego de plataformas, muy similar a la de cualquier Mario Bross. Los escenarios están llenos de saltos, trampas mortales, teletransportes, explosivos y peligros de toda clase. Como veis, todos los ingredientes indispensables para crear una excelente pantalla de plataformas. No obstante, la diferencia fundamental es que nosotros no debemos llegar a la meta con nuestro personaje, sino con nuestra bola a través de los golpes más certeros que podamos dar.

Para realizar tal empresa dispondremos de 3 palos diferentes que nos proporcionarán 3 golpes de distinta clase para poder superar cualquier tipo de obstáculo. Por un lado disponemos de un Drive, el palo más largo y potente que nos servirá para recorrer más metros con nuestra bola. Los golpes son más fuertes pero irán más rectos. Para elevar la bola un poco más y realizar golpes de media distancia tenemos el Iron, con el que haremos la mayoría de los golpes situados a mitad de recorrido. Tiene una potencia y elevación media. Por último, tenemos el Wedge,  el palo más corto que nos permitirá ejecutar golpes más precisos y controlados, por lo tanto, menos potentes.

Mecánicas simples pero potenciadas con las cartas

La jugabilidad de Cursed to Golf es muy básica pero magnífica. Para ejecutar los golpes tendremos que pulsar un sólo botón. Una vez inspeccionado el campo con la cámara y elegido nuestro correspondiente palo nos dispondremos a golpear la bola. Para ello, pulsaremos un botón que nos rellenará automáticamente la potencia del golpe. Una vez seleccionada, dependiendo de si el golpe va a ser más potente o menos, nos aparecerá una línea de trayectoria que irá subiendo y bajando. Cuando la guía alcance nuestro punto ideal deberemos de volver a pulsar el mismo botón para realizar el golpe y…¡rezar para no caer en alguna trampa!


Como los escenarios son tan enrevesados, la buena gente de Chuhai ha implementado un sistema de ayudas especiales a través de cartas. Estas Cartas del As nos permitirán hacer golpes realmente espectaculares ya que nos permitirán, entre otras cosas: parar el tiempo, cambiar la trayectoria de la bola en pleno vuelo, hacer que se divida en tres bolas diferentes, congelarla o, si nos ha salido muy mal el golpe, nos permitirá repetir el lanzamiento. Como veis, todo un despliegue de imaginación que se nos pone a nuestra disposición para llegar sanos y salvos al final del hoyo. Y no todo acaba aquí: al final de cada recorrido debemos enfrentarnos a un jefe final que nos pondrá las cosas realmente complicadas. Por suerte, si logramos derrotarlo, nos obsequiará con algún tipo de recompensa útil que nos permitirá ganar alguna habilidad o algún punto de control que nos permita continuar desde ese punto al morir en vez de tener que empezar desde el principio.

Cursed to Golf: la tienda Eterni-Tee

Estas cartas son la clave de Cursed to Golf y las iremos consiguiendo cuando recorramos el campo (en algunas ocasiones podremos elegir el camino a seguir en las bifurcaciones) o en la tienda Eterni-Tee. En este lugar podemos comprar diferentes sobres de cartas con el dinero que vayamos ganando en cada hoyo superado. Dichos sobres contienen varias cartas sorpresa y la cantidad va en función de la rareza de cada sobre. Os recomiendo que compréis el máximo posible ya que necesitaréis la ayuda de las cartas para superar la aventura.

Pero en la tienda no sólo se pueden comprar las cartas sino que podemos, además, guardar las que ya tenemos en un álbum. Esto funciona como un archivo que nos permite almacenar las cartas que queramos guardar para una próxima ronda una vez nos hayan eliminado. Es una opción muy buena para los jugadores más previsores ya que, recordad, cada vez que fracasemos debemos empezar desde cero una nueva partida. En esta nueva ronda sólo conservaremos las cartas que hayamos guardado en el álbum y algunas habilidades especiales que hayamos adquirido durante el juego derrotando a algún jefe.  

Por último, este es el sitio ideal si queremos cambiar el aspecto de nuestro protagonista. Si nos cansamos de su apariencia siempre podremos escoger nuevos colores para él de forma completamente gratuita. Hay algunos sets de colores muy curiosos y que hacen referencia a ciertos personajes de otros videojuegos. Lo malo es que no podremos cambiar el vestuario, solo los colores. En este aspecto creo que el estudio podría haber hecho algo más ya que esto queda en algo meramente anecdótico.

Destruye los tótems para evitar la muerte

Como ya hemos comentado, su esencia roguelike hace que cada vez que fracasemos tengamos que empezar la partida nuevamente desde el inicio (si no tenemos alguna particularidad que nos permita continuar desde otro punto). Esto puede ser verdaderamente frustrante, sobre todo para los no iniciados en este estilo de juegos.

¿Cómo se pierde en Cursed to Golf? Muy sencillo. Para completar cada hoyo disponemos de un total de 5 golpes, que son los que componen el par de cada hoyo. Debido a la complejidad de los escenarios dicho número de golpes se nos va a quedar, casi con total seguridad, muy corto. Una forma de aumentar su número es a través de Cartas del As que nos proporcionen golpes extra o destruyendo ciertos tótems. Estos tótems se encuentran dispersos por el escenario y siempre y cuando los destrocemos con nuestra bola nos sumarán nuevos intentos en nuestro contador. Así. encontraremos dos tipos de figuras: las plateadas y las doradas. Las primeras nos otorgarán dos golpes extra y las segundas cuatro. De esta forma, se antoja casi imprescindible que localicemos algunas figuras en el recorrido para así llegar con más seguridad hasta el hoyo, otorgando al juego un puntito de estrategia que le sienta de maravilla.

Sonido y gráficos retro muy cuidados

El estilo artístico de Cursed to Golf es precioso, compuesto por un pixel art estilo 8-bit muy simpático y unas animaciones muy cuidadas. Es cierto que el título no hace un despliegue técnico abrumador, ni mucho menos, pero el estilo escogido le va como anillo al dedo. 

Por otro lado, los efectos de sonido son escasos pero están muy bien conseguidos. La banda sonora, además, es bastante pegadiza y las melodías están muy bien escogidas. No obstante, cuando llevas un rato escuchándola, puede resultar algo repetitiva y, si te atascas más de la cuenta en un hoyo, puede llegar a “taladrarte el cerebro”.

Cursed to Golf: un lobo con piel de cordero

Cursed to Golf es un juego que nos ha encantado. Derrocha imaginación por los cuatro costados y su fórmula nos ha parecido muy original, saliéndose un poco de los cánones típicos de los juegos roguelike.

Sin embargo, es un juego muy desafiante y no va a ser apto para todo tipo de público. Aquellas personas que se acerquen al título por su aparente simpatía deben saber que se trata de un juego duro y con un alto nivel de desafío. El hecho de tener que empezar una partida desde el principio tras cada fracaso puede significar el abandono del jugador por desesperación. Esto tiene una explicación sencilla: para desarrollar una ronda con éxito vamos a tener que pensar y ejecutar cada golpe muy bien, por lo que vamos a consumir una cantidad de tiempo considerable. Si tras ciertas horas de preparación un hoyo se nos atasca y acabamos muriendo la frustración va a ser tan alta que poca gente conservará las fuerzas y ganas necesarias como para volver a intentarlo, siendo lo más común dejar el siguiente intento para otro día.

Aún así, desde Área Xbox nos atrevemos a recomendárselo a todo el mundo, al menos para probarlo y, sobre todo, a los amantes del golf y el roguelike que busquen un buen desafío con una fórmula fresca y original.

Cursed to Golf

19,99 €
7.5

GRÁFICOS

7.0/10

SONIDO

7.0/10

JUGABILIDAD

8.5/10

Pro.

  • Una fórmula original y adictiva
  • Estilo artístico muy simpático
  • Las cartas potencian mucho la jugabilidad

Contra.

  • Muy lento en su desarrollo
  • Puede resultar muy frustrante

Acerca del autor

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Gamer desde los 80. Amante de los animales y el buen cine. Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. A veces salgo en películas por detrás.

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